Investigan el efecto climático en las lagunas de Resistencia y Corrientes
Los cambios en forma y temperatura de lagunas alrededor de las ciudades de Resistencia y Corrientes son investigadas en un estudio en la Facultad de Humanidades de la UNNE. La investigación intenta demostrar la incidencia en los cambios del clima de la región.
Las variaciones climáticas de las últimas décadas han modificado la forma y dinámica de las lagunas en zonas alrededor de las ciudades de Resistencia y Corrientes. Esto es analizado en una investigación en curso de la Universidad Nacional del Nordeste.
El estudio podría aportar información clave para la planificación urbana y la protección ambiental en la región.
El trabajo es realizado por Milagro del Piano, estudiante de Geografía de la UNNE. Plantea que las lagunas del NEA han experimentado cambios significativos en su forma y comportamiento durante las últimas décadas.
La investigación busca demostrar que estas alteraciones son consecuencia directa de los cambios en el clima de la región, donde se han observado más casos de lluvias intensas y sequías prolongadas.
El estudio se enfoca en los cambios experimentados en la recarga de las lagunas, debido a las fluctuaciones observadas en la precipitación y la evapotranspiración a nivel local para dos de las ciudades más pobladas del NEA. El proyecto se titula "Impacto del cambio climático en las lagunas del Noreste Argentino: estudio de caso para las áreas periurbanas de Resistencia y Corrientes (1.991-2.023)".
La investigación buscará entender cómo los cambios en la cantidad de lluvia y la evapotranspiración del agua afectan a la forma de las lagunas cercanas a las ciudades de Corrientes y Resistencia. "Queremos ver cómo estos cuerpos de agua responden a los períodos de mucha lluvia y a las épocas de sequía, los cuales están estrechamente relacionados a las fases cálida y fría, respectivamente, del fenómeno El Niño – Oscilación del Sur (ENOS)", indica la estudiante devenida en investigadora.
La importancia del estudio lo da un contexto donde el cambio climático se ha convertido en una preocupación global. Según las Naciones Unidas, este fenómeno implica cambios a largo plazo en las temperaturas y los patrones del clima. Aunque es un proceso natural, se ha acelerado en las últimas décadas debido a actividades humanas como la quema de combustibles fósiles, la tala de bosques y la expansión de las ciudades.
En el Nordeste Argentino, los científicos han notado un proceso de "tropicalización" desde la década de 1960. Esto significa que la región se está volviendo más cálida y húmeda. Este cambio no solo afecta la temperatura, sino también cuánto llueve y la cantidad de agua evaporada, lo que impacta directamente en la naturaleza y en las actividades de las personas.